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Trabajadores del Vaticano han instalado ya la chimenea en el interior y en el techo de la Capilla Sixtina, junto con un suelo elevado y mesas para el inminente cónclave, según se ve en unas imágenes publicadas por Vatican Media este sábado 3 de mayo. Los diversos tubos y piezas de la chimenea, que se utilizarán en la quema de las papeletas para el cónclave que elegirá al sucesor del papa Francisco, fueron transportados a mano por los trabajadores por los escalones de la Capilla Sixtina, decorada con frescos. Se espera que unos 133 cardenales, alrededor del 80% de ellos nombrados por Francisco, voten sobre su sucesor en la reunión secreta que comienza el 7 de mayo, y que los cardenales utilicen la chimenea para decir al mundo exterior si han elegido a un nuevo líder de la Iglesia Católica. El humo negro significará que no hay decisión, el blanco anunciará que se ha elegido al 267º Papa. La chimenea es claramente visible desde la cercana plaza de San Pedro, donde se espera que miles de personas se reúnan durante el cónclave para ver cómo avanza la votación secreta. Francisco, fallecido el 21 de abril, era papa desde 2013 y era el primer pontífice procedente del continente americano. Los dos últimos cónclaves, celebrados en 2005 y 2013, concluyeron al final del segundo día de votaciones.

-Redacción-