La primera niña diagnosticada en España con ELA infantil comienza sus estudios universitarios
Con 18 años y la ayuda necesaria, acude cada día a la facultad plantando cara a las consecuencias de la enfermedad
La sonrisa de Elsa guarda un motivo de peso: ser la primera joven con ELA en llegar a la universidad. Pasear por los pasillos hasta llegar a una de sus primeras clases no ha sido, desde muy pequeña, un camino fácil. Ha recibido muchos noes, pero su madre ha luchado para transformar lo imposible en posible. Consiguió hacer la PAU, sacar buena nota y entrar en un grado en Psicología. Estudia en igualdad de condiciones que el resto de los alumnos, con un dispositivo ocular plantea dudas en una pantalla y una persona hace las preguntas por ella. Su decisión y ganas de estudiar sacan de su madre una fuerza incansable. Juntas han marcado un precedente y viven el día a día pensando en un futuro donde ningún niño como Elsa vuelva a recibir un no por respuesta.