La crisis humanitaria en Gaza ha sido el detonante que ha llevado a Macron a reconocer al Estado palestino. Lo hará en septiembre ante la sede de Naciones Unidas. Una declaración de intenciones que Israel tacha de mancha en la historia francesa. Netanyahu acusa al presidente francés de ayudar directamente al terrorismo de Hamás. Estados Unidos se suma al rechazo. Es, dice Marco Rubio, una bofetada en la cara para las víctimas de los atentados del 7 de octubre. Macron sí ha encontrado el apoyo de Sánchez, que se sumó en 2024 a la lista de los más de 145 países que reconocen el Estado palestino. El primer ministro británico, Keir Starmer, aún no ha dado el paso, pero está convencido de que es la única salida a la guerra. Falta por ver la reacción de Alemania. La situación en Gaza es devastadora, en especial para menores de 5 años, es decir, para las futuras generaciones de palestinos. El pulso de la comunidad internacional empieza a dar sus frutos. Desde este viernes, Israel permitirá que países extranjeros lancen ayuda a Gaza en paracaídas desde el aire.