El municipio grancanario de Agaete ha vuelto a vibrar este domingo con su emblemática Fiesta de la Rama, una de las tradiciones más arraigadas del archipiélago canario, que ha reunido a más de 50.000 personas. Declarada Bien de Interés Cultural, la celebración tiene un fuerte componente simbólico: los participantes recorren las calles bailando al ritmo de orquestas, caracolas y tambores, portando ramas de eucalipto o pino como ofrenda a la Virgen de las Nieves, a la que se pide lluvia para las cosechas. Papahuevos, comparsas y ramas de hasta tres metros procesionan hasta el santuario, en un ambiente donde la devoción y la alegría popular se funden. La tradición, que se remonta a antiguos rituales prehispánicos de petición de agua, sigue transmitiéndose de generación en generación como una expresión viva de identidad canaria.