El párroco de El Álamo, localidad madrileña perteneciente a la Diócesis de Getafe, se ha visto envuelto en una polémica tras descubrirse que se ofrece como gigoló a través de su cuenta de Instagram. El sacerdote, Aroldo Herrera Carmona, figura en varias aplicaciones de contactos homosexuales, donde también promociona servicios compatibles con la actividad de un gigoló, lo que ha generado sorpresa y controversia tanto en la comunidad religiosa como en la población local. A pesar del revuelo público y las críticas recibidas, el párroco mantiene su puesto y no ha emitido declaraciones públicas al respecto. La Diócesis de Getafe tampoco ha comunicado ninguna medida oficial ante esta situación que cuestiona la imagen tradicional que se espera de un representante religioso. El caso ha abierto un debate sobre la vida privada de los sacerdotes y los límites entre su rol oficial y actividades personales en redes sociales. Este hecho ha provocado una respuesta diversa entre los fieles de El Álamo, desde quienes defienden el derecho a la privacidad hasta quienes consideran incompatible esta conducta con la labor pastoral y la moral católica.

DESCRIPCIÓN DE IMÁGENES

1.- PARROQUÍA DE EL ALAMO

2.- TOTALES DE VECINOS