Una gran baliza de señalización marítima de origen estadounidense ha aparecido encajada entre las rocas de la playa de Nemiña, en Muxía (A Coruña), tras quedar a la deriva en el Atlántico. El artefacto, de más de seis metros de altura y color rojo intenso, fue avistado flotando el lunes y arrastrado por las olas hasta su posición actual cerca del Furado Grande de la Punta do Almacén, a unos 200 metros del restaurante Saburil. Se trata de una boya de advertencia perteneciente a la Guardia Costera de EE.UU., utilizada para marcar los lados de canales de acceso o salida en puertos, con restos de una luz en la parte superior para alertar a navegantes sobre peligros u obstáculos. Todo indica que se desprendió de su anclaje original en la costa este estadounidense y recorrió entre 5.500 y 6.000 kilómetros impulsada por temporales en Terranova, con vientos del oeste y olas superiores a ocho metros.

DESCRIPCIÓN DE IMÁGENES

1.- BALIZA ENCALLADA EN LA PLAYA DE NEMIÑA EN MUXÍA