Desde el aire el dron hace el recorrido de la riada de unos 300 metros de ancho y casi dos de alto que barrió Alcanar (Tarragona). El color del barro es el trazo de los destrozos, hasta salir al mar. Ya desde abajo nos encontramos con este panorama casi bélico. La zona del paseo marítimo partido en dos. Así quedaba el bar de Rosa atravesado por la riada. Este bar vuelve a abrir como puede, porque ayer esta era la surrealista escena aquí. Nos llegan imágenes nuevas de lo que pasaba ayer. Comerciantes y vecinos quitan barro. Algunos, porque otros no han podido volver a casa. Hay varias familias realojadas. San Carles de La Rápita se inundó también con la misma tormenta. Las marcas negras son los testigos de hasta dónde llego la riada. Y aquí también imágenes de todo lo que se ha perdido en apenas tres horas.

-Redacción-