V066-SEVILLA JUEZ VIOLENCIA GENERO

*Los fallos en las pulsera de protección a víctimas de violencia de género han supuesto la denuncia de varias mujeres. Ahora la fiscalía de Madrid ha revelado meses de problemas tras el cambio del sistema en 2023. Las víctimas señalan que esos fallos son habituales.

Desde el ministerio quieren hacer ver que fueron fallos puntuales y que los registros electrónicos que quedaron anulados temporalmente se recuperaron después. Pero en 2023 ya había informes que advertían de las deficiencias y un año después el Observatorio de Violencia de Género señaló la falta de garantías. Hoy la ministra ha rebajado la responsabilidad, pero sus palabras no encajan con testimonios de personas implicadas en el sistema que vigila las pulseras. Todo empieza en el año 2023 cuando el proveedor de las pulseras de control telemático a agresores cambia. Se compran nuevos dispositivos, que hasta entonces eran de renting, y es ahí cuando empiezan los problemas técnicos e informáticos. Además de en el tobillo, ahora se colocan en las muñecas, más fácil para quitárselas.

La duración de la batería de estas pulseras también ha pasado de pilas de botón que duraban más de un año a una carga que tiene que realizar el propio agresor cada dos meses. A esto se suma los problemas de cobertura, como ocurre en muchas zonas rurales. Entonces cuando se produce un quebrantamiento de la orden de alejamiento no salta la alerta que avisa a la victima. Esta alerta la emiten desde el Centro Cometa. En el informe aparece la hora de entrada y salida de la zona de exclusión. Pero muchas veces, el sistema falla. El 17 de julio de 2024, COMETA tuvo una parada de 24 horas. Muchas víctimas de violencia de género se sienten desprotegidas. Incluso algunas han pedido que les quiten este sistema porque la alarma no deja de pitar. Creen que con estos fallos se les revictimiza.

Los implicados en la lucha contra la violencia de género resaltan que es fundamental mejorar la calidad tecnológica de las pulseras.