Galicia vuelve a sufrir el azote del fuego con dos focos declarados en la Ribeira Sacra, uno en el municipio lucense de Pantón y otro en la localidad ourensana de O Bolo. Los incendios han removido los peores recuerdos del pasado agosto, cuando la zona también se vio gravemente afectada por las llamas. De los dos fuegos, el que más preocupa a las autoridades es el de Pantón, que sigue activo y ha calcinado ya unas 2.000 hectáreas en los Cañones del Sil. La Xunta de Galicia mantiene la situación 2 de emergencia, aunque ha confirmado que en estos momentos la población no corre peligro. Varias aldeas han sido desalojadas de forma preventiva y los vecinos esperan el control del fuego para regresar a sus hogares. La magnitud del incendio y la complejidad del terreno han llevado al Gobierno a movilizar a la Unidad Militar de Emergencias (UME), que refuerza el operativo junto a brigadas forestales, bomberos y medios aéreos. Las autoridades insisten en que todos los recursos disponibles están desplegados para frenar el avance de las llamas en un enclave de gran valor ecológico y turístico, mientras se investigan las causas que han originado los dos incendios.

DESCRIPCIÓN DE IMÁGENES

1. RECURSOS CENTRO MANDO INCENDIO Y BUDIÁN HUMEANTE.

2. TOTALES SILVIA, VECINA DE BUDIÁN.