Bizi Eskola echa a rodar cambiando la vida de los que dejaron todo atrás buscando un futuro mejor. Una oportunidad para personas como Hans y Gerard, que han encontrado aquí un lugar donde reconstruir su futuro pieza a pieza. Aquí reparan y recuperan bicicletas donadas, además de impartir diferentes cursos, aunque la mejor lección es que siempre se puede volver a empezar.