Decenas de mujeres se han concentrado frente a la delegación de Sanidad de la Junta de Andalucía en Málaga por el fallo en la comunicación de los resultados de mamografías donde no se podía descartar un cáncer. El tiempo es clave para abordar la enfermedad. Elvira es una de las 2.000 afectadas. A ella la llamaron para una primera prueba pero no hubo respuesta por lo que entendió que todo estaba bien. Pero diez meses después se descubrió un bulto que era maligno. En la primera mamografía el estadio era uno, cuando se encontró el tumor ya estaba en estadio tres. A Pilar que está incluida en el programa de cribado por antecedentes familiares ni siquiera la citaron para la primera mamogafía y al descubrirse un bulto, desesperada, acudió a la privada. Allí obtuvo el diagnóstico y con todos los informes acudió al hospital público donde la operaron. Su sorpresa llegó cuando un año después de la doble mastectomía recibe la llamada para el cribado de mama. Son sólo algunos de los casos. La crisis a la que se enfrenta el gobierno de Moreno Bonilla le ha llevado a modificar su agenda para reunirse con el Consejo de Colegios de Médicos de Andalucía y la delegación de la AECC en esa comunidad. En esos encuentros se ha comprometido a resolver la situación de todas las mujeres con diagnóstico dudoso antes del 30 de noviembre.