Las imágenes que llegaban desde Marruecos, del paseo marítimo de Castillejos, ya vaticinaban lo que iba a ocurrir. Grupos de jóvenes que corren a saltar el murete para lanzarse al mar. Objetivo, cruzar a Ceuta. Una travesía que parece corta, pero que a nado, no lo es tanto. Y más si se adentran en el agua para no ser detectados por las patrullas, que vigilan a uno y otro lado de la frontera, y que esta noche han redoblado de inmediato su despliegue. La reciente desarticulación en el lado marroquí de una red que organizaba grupos de los llamados nadadores... no está impidiendo el goteo constante de los que, llegados de distintos puntos de Marruecos, quieran probar suerte. Un goteo que esta madrugada ha tenido un pico de caudal. Más de cien personas lo han intentado. La mayoría han acabado bien en las lanchas de la marina y la gendarmería del país vecino... bien en las de la Guardia Civil, los GEAS y salvamento marítimo. La niebla les ha complicado aún más la tarea, tanto de localización, como de rescate. Los agentes han conseguido interceptar... por no decir auxiliar... a buena parte de los que a duras penas han alcanzado tierra firme. Algunos han conseguido escapar hacia el barrio del Príncipe o la Almadraba. Para los demás, a partir de ahí, han comenzado los trámites de identificación y traslado. Una vez más, Ceuta, al límite, con un Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes ocupado ya por más de 800 personas y unos centros de menores que acogen a casi 500.