Los últimos mensajes de Belén, la educadora social asesinada en Badajoz

"Están intentando largarse", sospechaba la mujer

14 de marzo 2025 - 15:25

Badajoz

Belén Cortés Flores intuía que los menores de los que estaba a cargo en un chalet de Badajoz tramaban algo ese domingo. Lo que esta educadora social no se esperaba es que, unas horas después de comenzar el turno de noche, dos adolescentes acabarían golpeándola y estrangulándola con un cinturón hasta causarle la muerte. Así se desprende del análisis del teléfono de la mujer de 35 años que escribió al padre del más pequeño, de 14 años, un mensaje en Whatsapp a las 21:45 horas: "Están intentando largarse", decía. Estaba nerviosa, pensaba que el chico intentaba fugarse por segunda vez consecutiva durante el mes de marzo. En carnavales se escapó del centro tutelado por la Junta de Extremadura con otro adolescente de 15 años que supuestamente era quien le incitó. Fueron a casa de la madre del más mayor en la localidad pacense de Villanueva de los Barros. Ella les ofreció cocaína, heroína, hachís y marihuana. Estuvieron consumiendo juntos e incluso la mujer les pidió que acudieran a una cafetería cercana para robar 40 euros de la caja registradora, que destinaron a la compra de más estupefacientes. La Guardia Civil les detuvo y volvieron a quedar internados en la vivienda. Belén había denunciado su fuga y que los chavales habían robado las llaves de la casa y sus tarjetas de crédito. Se lo contó a su novio, a su familia y a sus amigas, entre ellas Alicia Fernández, que le recomendó que tuviera mucho cuidado. Belén volvió a escribir al padre del pequeño a las 21:55 horas: “Está un poco rebelde, con intención de irse con el otro. Estoy intentando reconducir”, le dijo. Cinco minutos después, escribió el que sería su último mensaje a las 22:04 horas. “He conseguido que se meta en la cama, a ver si le hace efecto el jarabe. Después de matarla, los adolescentes huyeron en su coche junto a otra chica de 17 años y se llevaron el teléfono de la trabajadora social. A las 22:52 horas recibió el último WhatsApp del padre del pequeño: “¿Se han dormido?”, preguntaba el hombre. Pero la mujer de 35 años ya estaba muerta, los chicos en la carretera camino de Mérida y otro menor tutelada en el mismo chalet pedía auxilio.

-Redacción-

Agencia Atlas
Editado
Sociedad
1m 26s
Locutado

Más videos

Actualidad