La lucha de un guardia civil en silla de ruedas para que le adapten su puesto de trabajo

A Jacobo Barchín, guardia civil de 34 años, un accidente de bicicleta en 2020 le cambió la vida. Y aunque desde entonces ha ido ganándole batallas a su lesión medular, hay un combate que se le resiste, el que mantiene con la Benemérita, que se niega a adaptarle su puesto de trabajo. Recientemente, un tribunal médico mitlitar ha dictaminado su retiro de por vida, pero Jacobo se resiste. Ya ha agotado la vía administrativa y piensa seguir peleando para conseguir que nada ni nadie acabe con el que ha sido su sueño desde siempre, ser guardia civil.
-Redacción-