El estado anímico se resiente con el mal tiempo prolongado
La falta de luz solar y la bajada de temperaturas pueden influir en la producción de serotonina

La lluvia sigue cayendo sin descanso y salir de casa sin paraguas sigue siendo una misión imposible. Han pasado días, incluso semanas, sin apenas ver el sol, y para muchos, esta situación empieza a hacerse cuesta arriba. No es solo una cuestión de comodidad. Tantos días de precipitaciones constantes tienen un impacto en nuestro estado de ánimo. La falta de luz solar y la bajada de temperaturas pueden influir en la producción de serotonina, el neurotransmisor que regula el bienestar emocional. Como consecuencia, aparecen el cansancio, la apatía e incluso una sensación de tristeza generalizada. La tendencia a cancelar compromisos y evitar salir es común en estos días, aunque los expertos insisten en que siempre hay alternativas para mantenerse activo y evitar el desánimo. Eso sí, no a todo el mundo le afecta de la misma manera. Hay quienes, incluso en pleno temporal, siguen con buen ánimo y ven la situación con optimismo.