Libertad con cargos para el anestesista de la clínica dental de Alzira
La magistrada considera que todavía no hay suficientes indicios que prueben que la muerte de la menor se debiera tan solo a una imprudencia profesional
Con la cara cubierta por una capucha abandonaba los juzgados el anestesista de la clínica dental de Alzira en la que falleció una niña de 6 años tras ser sedada. La jueza lo ha dejado en libertad, aunque le ha retirado el pasaporte y deberá comparecer periódicamente en el juzgado. La magistrada considera que todavía no hay suficientes indicios que prueben que la muerte de la menor se debiera tan solo a una imprudencia profesional.