Funeral por la segunda víctima mortal de los incendios de León
Ha tenido lugar en Quintanilla de Flórez, su pueblo natal
Portan el féretro con los restos de Jaime Aparicio y los aplausos de sus vecinos rinden homenaje a quien decidió arriesgarlo todo por tratar de salvar una zona que ha vivido escenas de pesadilla. Las imágenes grabadas por efectivos de extinción muestran cómo ardía buena parte de Palacios de Jamuz. Tres días después se puede ver la parte más castigada. Los vecinos están regresando con cuentagotas a este y a otros pueblos de la comarca. Hay también casas quemadas en Quintanilla y Congosto. De aquí era Abel, que falleció junto a su amigo Jaime cuando quedaron atrapados entre dos lenguas de fuego. Diego conocía a los dos fallecidos y también ayudó a sofocar el fuego. “Mucha gente aquí no tiene ni seguro ni nada, a ver a quién van a reclamar”, se pregunta. La gente de más edad aún recuerda la huida y al regresar recorren sus pueblos observando la ruina que ha dejado un incendio que provocaba sorpresa y espanto incluso entre los profesionales más experimentados.