Dos exreligiosas y un anticuario, detenidos por la venta ilegal de patrimonio histórico del monasterio de Belorado
La Guardia Civil ha recuperado piezas de alto valor tras registrar los conventos de Belorado y Orduña
La Guardia Civil ha detenido a dos exabadesas vinculadas a los monasterios de Belorado (Burgos) y Orduña (Bizkaia) por su presunta implicación en la extracción, traslado y venta irregular de obras de patrimonio histórico procedentes del convento burgalés. Las arrestadas pasaron la noche en los calabozos después de que los agentes irrumpieran en el monasterio y localizaran numerosas piezas que habían sido trasladadas sin autorización. Durante el registro, los agentes recuperaron un crucifijo y varias tallas y objetos religiosos de notable valor, algunos de ellos ya en proceso de venta. La investigación ha constatado que varias piezas fueron ofertadas en Internet y que un San Antonio de Padua del siglo XVII llegó a aparecer en una tienda de antigüedades de Madrid. Por este motivo también ha sido detenido un anticuario de la provincia de León, acusado de adquirir estos bienes sin exigir la documentación acreditativa. El operativo incluyó registros simultáneos en Belorado y en el convento de Orduña, donde se requisaron más obras aún pendientes de inventariar. La Guardia Civil investiga un presunto delito de apropiación indebida agravada, dado que se trata de bienes pertenecientes al patrimonio histórico protegido. El revuelo en el convento vizcaíno fue notable. Las exclarisas rebeldes, conocidas por su disputa con la Santa Sede, presenciaron cómo los agentes se llevaban tallas y piezas que ellas defendían como propias. Sor Paloma, señalada por la investigación, fue arrestada poco después del registro. Esta mañana, tanto ella como la exabadesa de Belorado han declarado ante el Juzgado de Instrucción de Briviesca. Varias antiguas compañeras, entre ellas Sor Belén y Sor Sión, acudieron a apoyarlas. Las religiosas excomulgadas mantienen una batalla judicial con la Santa Sede por la propiedad de los conventos, un conflicto que se cruza ahora con la investigación penal por la supuesta comercialización irregular de su patrimonio. La causa sigue abierta y no se descartan nuevas diligencias a medida que avance el inventario de las obras intervenidas.