Elías de Andrés, el herrero eterno que comenzó a trabajar el metal con diez años
Su obra está compuesta por más de 20.000 piezas, muchas de ellas reunidas ahora en la casa de la moneda de Segovia
Para ver la auténtica esencia de un herrero hay que posar la mirada en las manos, cada una de sus durezas cuenta una historia de vida. Elías de Andrés lleva trabajando el metal desde los diez años. Cuenta que empezó con su padre en la fragua del pueblo tirando del fuelle y que lo que hacían entonces eran hachas para los Gabarreros de La Granja, Valsaín y Rascafría. No tiene reparo en decir su edad, casi un siglo para pasar del niño aprendiz al gran maestro. Su obra está compuesta por más de 20.000 piezas, muchas de ellas reunidas ahora en la casa de la moneda de Segovia. Algunos lo llaman el herrero eterno y ahora entendemos el por qué.