Un diagnóstico precoz, la mejor herramienta contra el cáncer de mama
El buen funcionamiento del sistema de cribados es esencial para la supervivencia de miles de mujeres cada año
Conchi se presentó a un cribado de cáncer de mama en marzo. "El 2 de abril me dijeron ya pues que era un cáncer y que era malo. Y nada, enseguida, el 7 de mayo estaba ya operada", recuerda. Esa rapidez fue clave para atajar el tumor. A Nicoleta también la operaron solo un mes después de diagnosticarle su tercer cáncer de mama. "Tuve los ganglios afectados, a lo mejor si tardaran un mes más en operarme pues a lo mejor la cosa podría estar un poco más peliaguda y ahora no estar curada como estoy", asegura. En ambos casos, al igual que en el de Tania. El sistema sanitario gallego actuó con mucha rapidez. Valoran esa celeridad y también el no sentirse solas. Un taller de cuidado de la piel, por ejemplo, les ayuda afrontar el proceso con más optimismo. Porque para ganar la batalla a la enfermedad necesitan no sentirse solas.