Las temperaturas no bajan y las del mar, tampoco. Si tenían pensado bañarse en la playa para refrescarse, este año no es una opción. La temperatura del agua marca récords históricos este mes de junio. El Mar Mediterráneo supera los 28 grados en la boya de Valencia. Y el Cantábrico alcanza los 24 grados. El pico de calor suele llegar en agosto, después de calentarse durante todo el verano. Pero cada vez lo hace antes. El aumento de temperaturas en el aire, y en el mar, carga la atmósfera de energía. El combustible perfecto para que las tormentas de verano sean cada vez más intensas. En la playa de La Malvarrosa de Valencia, imposible refrescarse con los 35 grados que marcan los termómetros. Los expertos advierten que esto es solo el principio, de lo que viene.