Árboles monumentales, el tesoro oculto en los bosques catalanes
Cada árbol monumental es un refugio de la biodiversidad
En los bosques de Cataluña hay casi 300 árboles monumentales. Son testigos mudos del paso del tiempo, pero también importantes refugios de la biodiversidad. Una encina centenaria puede albergar cien especies de plantas y animales. Por eso, pasear por alguno de estos bosques es un placer para los sentidos. Podemos encontrar joyas naturales como una encina de casi 300 años. Es considerado un árbol monumental. Por eso, el Centro de Investigación Ecológica y Aplicaciones Forestales (CREAF) se ha propuesto protegerlos. Sandra y Laura, investigadoras del centro, documentan el estado de cada uno de ellos. Miden su diámetro y su altura, y toman muestras del suelo y de la flora y fauna que habita en el árbol. Así pueden prevenir su deterioro porque con frecuencia ven copas defoliadas y evidencias de afectación por la sequía. En el laboratorio es donde analizan las muestras recogidas. Si detectan algún problema que pueda poner riesgo al árbol pueden proponer soluciones. Gracias a ellas, estos gigantes tendrán una vida aún más larga.