En Málaga ha sido elegido este fin de semana el mejor espeto, algo delicioso, pero que tiene, como todo, su técnica. Es la única comida que se sostiene en el aire. Es el tradicional espeto. Sardinas colocadas en vertical en unas cañas donde se ensartan los pescados para asarlos con la flama de una hoguera. El mejor momento para degustarlos son los meses sin 'erre' en el calendario. De mayo a agosto, porque es en esa época cuando tienen más grasa que en otra época del año. Y ahora el gran secreto del espeto: es la calidad del fuego, donde debe predominar el calor y no el humo. El espetero Alfonso es todo un alquimista, capaz de convertir la plata en oro.

-Redacción-