Llevaban tiempo vigilándoles. Sabían que organizaban peleas de gallos y el día que iban a celebrar un encuentro. Los investigadores del Seprona se presentaron en la finca, situada en la localidad murciana de Fuente Álamo e identificaron a 60 asistentes. Durante la inspección, descubrieron un tentadero, con más de 200 sillas y un marcador digital para llevar el recuento en las peleas. Escondido detrás de un bar. En una zona de jaulas, medio centenar de gallos de la raza combatiente española. En el municipio, los vecinos desconocian esta actividad, que en España es ilegal, excepto en Canarias y Andalucía. Aunque solo para la seleccion de cría o exportación a países donde estas riñas están permitidas. La Guardia Civil se incautó de 40.000 euros destinados a las apuestas clandestinas. Dos personas están siendo investigadas por maltrato animal y defraudación del fluido eléctrico. Tenían antecedentes y les consideran muy violentas. Están en libertad.

-Redacción-