Una de las obsesiones de los miembros de la trama era la seguridad en sus comunicaciones. Unos temores que chocan con la estrategia de Koldo de grabar todas sus conversaciones. El 12 de diciembre de 2023 Koldo recrimina a Santos Cerdán que hace mucho que está detrás de él y el exsecretario de Organización del PSOE alega que le habían avisado de que le estaba investigando la Guardia Civil. Y ahí es cuando hablan del peligro de la seguridad de sus comunicaciones. Cerdán le dice a Koldo que utiliza la aplicación de mensajería Signal para hablar con Bildu porque es más segura, pero Koldo prefiere WhastApp, además de otros métodos. En el registro de su casa se encontraron 23 teléfonos móviles. Según el informe de la UCO, Koldo los entregaba a empresarios con los que presuntamente negociaba las mordidas. El nombre en clave de los terminales era café o cafetera. Rubén Villalba, guardia civil implicado en la trama, era la persona que supuestamente facilitaba esos teléfonos. Cuando el caso estalla y se conoce la implicación de José Luis Ábalos, Santos Cerdán le ofrece en nombre del PSOE pagar su defensa y un puesto de trabajo. A cambio, Ábalos tenía que entregar su acta de diputado, algo que no ha hecho, además de un pacto de silencio.