Es el encuentro distendido de Felipe VI con el secretario general de la ONU antes de la cumbre de financiación para el desarrollo de Sevilla, la primera de Naciones Unidas que se celebra en España.

Doscientas delegaciones con sesenta jefes de Estado y de Gobierno, pero del G7, los más poderosos del mundo, no están ni la primera ministra italiania, ni el canciller alemán, ni el 'premier' británico. Y lo más importante, tampoco Donald Trump. Y precisamente del G7 critica Pedro Sánchez uno de sus últimos pactos.. Apuesta por un sistema fiscal "más justo y transparente", en el que "las grandes corporaciones aporten más". "Lamentablemente no nos llegaron las mejores noticias del G7 la semana pasada", apunta el presidente refiriéndose a la decisión de que las multinacionales estadounidenses no paguen el impuesto mínimo del 15 por ciento pactado en la OCDE. Sánchez advierte de que el desarrollo sostenible está en riesgo por recortes en financiación todo este año.

Precisamente Trump ha desmantelado USAID, una de las agencias humanitarias más importante del mundo.