Defensa quiere cortar por lo sano, reducir la independencia tecnológica de Israel. Y para que no se repita la crisis de las balas, la ministra de Defensa ha decidido cancelar la compra de 1.680 misiles contracarro Spike LR2. Pesan casi 13 kilos, alcanzan hasta 8 Km de distancia y su letalidad es tan elevada que no hay blindaje que se le resista. La idea es ser coherente entre lo que defiende el Gobierno y los contratos que España tiene con Israel, a pesar de que estos se firmaran antes del atentado del 7 de octubre. Por ello, tampoco incorporarán tecnología de empresas israelíes, serán íntegramente españoles. Una decisión alineada con la posición que mantiene el Gobierno, pero que traerá como consecuencia directa el encarecimiento de estos contratos.