El 'caso Leire Díez' y los 35 días de silencio de Pedro Sánchez
El presidente sigue evitando las preguntas de los periodistas mientras que líderes como García-Page piden un adelanto electoral
Pedro Sánchez no se expone a las preguntas de los periodistas desde el 29 de abril. A partir de ese día llegó su apagón con los medios, silencio que se ha hecho notar en la última semana. Desde que se conoció el caso de Leire Díez al presidente lo hemos visto en el Colegio de Ópticos, en la Comisión Europea o inaugurando un hospital en Melilla. En todos sus actos ha evitado los micrófonos y la ausencia de explicaciones hoy ya no tiene explicación para sus socios: "Lo que hoy hemos visto, me van a permitir que lo tilde directamente de esperpento, y creo que merece una profunda aclaración", pedía la vicepresidenta Yolanda Díaz. Algunos de los aliados progresistas del Gobierno, como Podemos y ERC, han pedido respuestas en el Congreso. Pero hay líderes socialistas que no se conforman con ello. Es el caso del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page: "Hay que parar esta hemorragia". Habla de multitud de responsables pidiendo un adelanto electoral para que las generales no coincidan ni afecten a las elecciones locales y autonómicas. Cree que la situación política está en un laberinto sin salida: "Y si eso significa que el veredicto de los españoles sobre la política nacional sea anterior, yo creo que la inmensa mayoría lo preferiría". Óscar López, ministro de Transformación Digital, discrepa: "Eso es lo que busca la derecha. Esto es una campaña de guerra sucia contra el Gobierno". Otros ministros, como Ángel Víctor Torres, ante esta situación también optan por la estrategia: "Como ministro no tengo nada que decir", de mantener la boca cerrada.