El tifón Kalmaegi ha pasado por las islas centrales de Filipinas, y sus fuertes lluvias y tormentas ha provocado inundaciones, dejando al menos 4 muertos.

Aunque Kalmaegi, conocido localmente como Tino, ha perdido fuerza desde que tocó tierra esta mañana, sigue azotando el país con vientos de 130 km/h y ráfagas de hasta 180 km/h, mientras barre las islas Visayas y el norte de Palawan en dirección al mar de la China Meridional.

El tifón también ha afectado a algunos lugares turísticos populares en Surigao del Norte, dejando a personas varadas debido a la interrupción de los servicios de ferry y los vuelos, según ha confirmado Daryll Gómez, jefe de operaciones de la agencia provincial de desastres.

Por su parte, la agencia nacional de desastres ha informado de que decenas de miles de residentes han sido evacuados en toda la región de Visayas, incluidas partes del sur de Luzón y el norte de Mindanao.

Kalmaegi ha llegado en un momento en que Filipinas, que sufre una media de 20 tormentas tropicales al año, se recupera de una serie de desastres, entre ellos terremotos y fenómenos meteorológicos extremos, ocurridos en los últimos meses.