Fuertes vientos y tormentas tienen asolada todo Nueva Zelanda. Las abundantes precipitaciones han provocado inundaciones en carreteras costeras causando importantes alteraciones en la capital, Wellington, que enfrenta los vientos más intensos en más de una década, según informó la agencia meteorológica nacional. El Instituto Nacional de Agua e Investigación Atmosférica (NIWA) ha registrado una velocidad media del viento en Wellington de 87 kilómetros por hora, la cifra más alta registrada desde 2013, mientras que las ráfagas en Baring Head han llegado a hasta los 160 kilómetros por hora. Ante estas condiciones extremas , la mayoría de los vuelos de entrada y salida del aeropuerto de Wellington han quedado cancelados.