Tatuajes para afrontar una guerra
Grabarse el cuerpo se ha convertido para soldados y civiles ucranianos en un modo de resistencia frente a la invasión rusa
Desde la invasión rusa, los tatuajes se han extendido entre las tropas ucranianas. Unos por camaradería, otros por patriotismo e incluso para camuflar heridas de guerra. Hay casos de soldados caídos en combate cuyos cuerpos han podido ser identificados gracias a sus tatuajes. Pero poco a poco, el gesto de grabarse el cuerpo se ha popularizado también entre la ciudadanía ucraniana. Un modo de sobrellevar la pérdida de seres queridos o de sentirse cerca de poblaciones que han acabado cayendo en manos rusas con el avance de sus tropas en estos cerca ya de cuatro años de guerra.