El ejército israelí se ha retirado de algunas zonas de Gaza en un repliegue parcial hacia la línea acordada y con el que mantendrá, de momento, el control del 53% de la Franja. Es uno de los primeros pasos tras el pacto con Hamás. En esta carretera de la costa, la población palestina desplazada ha comenzado a hacer el viaje de vuelta hacia sus hogares, muchos arrasados, con la esperanza de regresar hacia el norte, hacia Ciudad de Gaza sin temer bombardeos. Porque el alto el fuego ya ha entrado en vigor, según ha anunciado el Ejército israelí. El primer ministro Netanyahu ha afirmado que las tropas israelíes seguirán en la Franja hasta que Hamás se desarme. Antes, y después de que su gobierno ratificara el acuerdo, flanqueado por los estadounidenses Kushner y Witkoff, agradecía la ayuda de Trump para lograr un acuerdo que permitirá el regreso de los rehenes. Oraciones por esos secuestrados aquí en Tel Aviv en la cuenta atrás para su liberación. Hamás tiene 72 horas para devolverlos. El negociador de Hamás Jalil al Hayya afirma que ha recibido garantías de los mediadores del fin de la guerra. Con la primera fase del acuerdo, el gobierno israelí permitirá la entrada de más camiones con ayuda para una exhausta población gazatí.