Primeros efectos del tifón Ragasa en Filipinas y Taiwán
Se dirige ya a las costas del sureste de China
El tifón Ragasa es, por el momento, el tifón tropical más poderoso de este año, y así lo está demostrando. Ayer lunes arrasó con parte de Filipinas, provocando múltiples inundaciones causadas por las fuertes precipitaciones que ha dejado en algunas poblaciones al norte de Manila, la capital. El presidente del país, Ferdinand Marcos Jr, ha ordenado activar todas las alarmas a la Agencia Nacional de Respuestas a Desastres, y ha movilizado al resto de agencias gubernamentales. Por su parte, Taiwán también se recupera del paso de este tifón, que ha causado estragos en la zona este del país esta mañana. En Hualien, al sureste de Taipéi, un río desbordado por la rotura de la barrera de contención de un lago cercano ha destruido un puente y ha anegado un pueblo. En la Isla Orquídea, a 90 kilómetros al sur de la principal ciudad, sus habitantes cuentan que resultaba imposible caminar erguido por la fuerza del viento, que ha originado también grandes olas. Veinticinco personas han resultado heridas en todo el país, y hay 273 vuelos cancelados. Con vientos huracanados de hasta 220 kilómetros por hora, el tifón Ragasa se dirige ya a las costas del sureste de China. Ciudades como Shenzhen, en la provincia de Guangdong, o Hong Kong se preparan ahora para su llegada.