En Australia, la Gran Barrera de Coral está sufriendo el mayor deterioro desde que se empezó a monitorizar hace 39 años. Los niveles de cobertura coralina han descendido entre un cuarto y un tercio en las regiones norte y sur de la barrera tras años de crecimiento. El estrés térmico ha provocado el blanqueamiento de uno de los mayores ecosistemas del planeta.