El presidente venezolano Nicolás Maduro ha recordado la exitosa canción de Bobby McFerrin de 1988 «Don't Worry, Be Happy» durante un mitin con sus seguidores, en el que pidió calma ante la escalada de tensiones con Estados Unidos.

«A los ciudadanos estadounidenses que están en contra de la guerra, les respondo con una canción muy famosa: Don't worry, be happy», ha dicho Maduro, antes de cantar mientras sonaba la canción. «No a la guerra, sé feliz. No, no a la guerra loca, no, sé feliz».

El gesto se produce en un momento en que las relaciones entre Caracas y Washington se deterioran por el aumento de la presencia militar estadounidense en el Caribe.

La actuación musical de Maduro ha ocurrido el mismo día en que la líder de la oposición María Corina Machado debía recibir el Premio Nobel de la Paz en Oslo, en presencia del rey Harald, desafiando la prohibición de viajar impuesta por las autoridades venezolanas durante una década y tras pasar más de un año escondida. Machado salió en secreto de Venezuela para intentar llegar a la capital noruega, pero finalmente no ha podido llegar a tiempo a la ceremonia.