Las aguas del Mar Caribe siguen revueltas. A medida que pasan los días Estados Unidos intensifica la actividad de sus tropas desplegadas frente a la costa venezolana y en las bases de Puerto Rico. Anoche su comandante Supremo volvió a elevar el tono, anunciando una invasión terrestre de Venezuela amparándose en la lucha contra el narcotráfico. Desde Caracas el presidente venezolano asegura que esa presión no podrá con su régimen. Después Nicolás Maduro, continuó en perfecto espanglish, insultando y recordando los estadounidenses que no se trata de eliminarlo solo a él, sino también a millones de venezolanos. La presión de Estados Unidos sobre Venezuela también aprieta su principal recurso económico. Esta semana el mar Caribe fue el escenario del abordaje a un petrolero con dos millones de barriles de petróleo venezolano con destino a Cuba. Mientras tanto, desde Oslo la líder opositora venezolana, María Corina Machado mantiene el foco internacional sobre su figura tras recibir esta semana el Premio Nobel de la Paz y sigue sin aclarar si regresará próximamente a Caracas. El Caribe vuelve a ser un tablero de ajedrez geopolítico y Venezuela la pieza central de una partida en la que nadie termina de hacer jaque.