Esta mañana en el centro de Bangkok, en Tailandia, frente al hospital Vajira, el suelo se ha hundido de repente, dejando un enorme socavón de unos 50 metros de profundidad, que ocupa unos 900 metros cuadrados.

No ha habido ninguna víctima, aunque el terreno ha arrastrado consigo un vehículo eléctrico de una comisaría de policía cercana, que se ha quedado suspendido justo al borde del socavón, y dos postes eléctricos. Además, ha hecho que reviente una tubería, por lo que las autoridades, que se reunido alrededor del agujero, han avisado del corte de luz y agua en la zona. Por su parte, el hospital ha anunciado que no seguiría atendiendo a pacientes durante el incidente.

Según ha confirmado el primer ministro, Anutin Charnvirakul, la causa del socavón ha sido el deslizamiento de tierra provocado por la construcción de un tren subterráneo. Esta mediodía, las autoridades han informado de que ya habían conseguido detener el movimiento del suelo, y que seguirían vigilando cerca del lugar de los hechos.