Azerbaiyán y Armenia firman un histórico acuerdo de paz auspiciado por Trump en la Casa Blanca
El pacto pone fin a décadas de conflicto y otorga a EEUU derechos exclusivos para desarrollar un corredor estratégico en el Cáucaso Sur
Azerbaiyán y Armenia firmaron este viernes 8 de agosto un acuerdo de paz, mediado por Estados Unidos, durante una reunión con el presidente norteamericano, Donald Trump, en la Casa Blanca. El pacto, que busca impulsar los lazos económicos bilaterales tras décadas de enfrentamientos, supone —si se mantiene— un importante logro para la administración Trump y podría incomodar a Moscú, que considera la región parte de su esfera de influencia. “Han sido 35 años de lucha y ahora son amigos, y lo serán por mucho tiempo”, declaró Trump en la ceremonia de firma, acompañado por el presidente azerbaiyano, Ilham Aliyev, y el primer ministro armenio, Nikol Pashinián. El acuerdo contempla el cese de hostilidades, el restablecimiento de relaciones diplomáticas y el respeto a la integridad territorial mutua. Además, concede a EE. UU. derechos exclusivos para desarrollar un corredor estratégico en el Cáucaso Sur, con el objetivo de facilitar las exportaciones de energía y otros recursos. Trump anunció también pactos separados con cada país para ampliar la cooperación en energía, comercio y tecnología, incluida la inteligencia artificial, así como el levantamiento de restricciones en materia de defensa con Azerbaiyán. Ambos líderes elogiaron el papel de Trump en la consecución del acuerdo y expresaron su intención de nominarlo al Premio Nobel de la Paz. Según la Casa Blanca, este pacto se suma a otros logros recientes de la administración en la mediación de conflictos internacionales, aunque sigue pendiente la resolución de guerras como la de Ucrania o el conflicto entre Israel y Hamás. Fuentes oficiales señalaron que el acuerdo es el primer cierre de un conflicto “congelado” en la periferia rusa desde el final de la Guerra Fría y podría transformar la región, marcada por fronteras cerradas y tensiones étnicas históricas. Organizaciones de derechos humanos, como Freedom Now, han instado a que se aproveche el nuevo marco de diálogo para abordar la liberación de prisioneros políticos en Azerbaiyán, cifra que grupos internacionales estiman en alrededor de 375 personas.