Cinco años han pasado de aquel incendio que la arrasó pero hoy por fin Notre Dame ha reabierto sus puertas. La lluvia no ha impedido celebrar una ceremonia cargada de emoción y simbolismo. Pasadas las siete de la tarde el arzobispo de París llamaba con su báculo a las puertas de la catedral, que luce ya sus emblemáticas torres y su aguja reconstruidas. Las puertas se abrían y mostraban al mundo su espectacular interior. Un gran aplauso agradecía el esfuerzo de los bomberos que lucharon contra el fuego y de todos los que han participado en la restauración. Allí estaban 40 jefes de Estado y uno que está a punto de serlo y que se ha convertido en el gran protagonista: Donald Trump, sentado en primera fila junto Emmanuel Macron y su esposa, Brigitte Macron, y Jill Biden, la mujer del ausente presidente de Estados Unidos. Protagonistas han sido también el multimillonario aliado de Trump, Elon Musk, y el presidente de Ucrania, vestido con su habitual indumentaria de campaña. Una ceremonia de reapertura de la catedral muy esperada por los franceses y por los millones de personas que visitan París cada año.

-Redacción-