Cuidada puesta en escena en las primeras imágenes del cuerpo del papa Francisco en el féretro
Los restos mortales del pontífice reposan en un sencillo ataúd de madera y zinc forrado de rojo

No sólo son las primeras imágenes de los restos del papa. Aquí en la capilla de la residencia de Santa Marta, donde vivía Francisco, se llevó a cabo ayer, la llamada "ceremonia de la constatación de la muerte". Y en ese antiguo ritual funerario de los papas, Bergoglio, rodeado por su núcleo más cercano, también parece haber querido dejar su propio sello. Apreciamos que el cuerpo del pontífice reposa en ese sencillo ataúd de madera y zinc forrado de rojo. No ha querido ser embalsamado. En su cuerpo, casulla del mismo tono y en su cabeza la mitra papal. No luce el báculo típico de los pontífices. En sus manos un humilde rosario entre sus dedos y un anillo de plata de su época de Buenos Aires, en lugar del anillo del pescador. El camarlengo lo bendice con agua bendita después de que, como manda la tradición, el médico del papa, leyera en voz alta la causa clínica de la muerte por un ictus. Y otra vez más, por deseo expreso de Francisco, el acto de confirmación de la muerte ha mudado a un momento para la oración por su alma. Entre los presentes, la otra mano derecha del papa, el cardenal Pitro Parolin, miembros de la Guardia Suiza y varios secretarios. Todos daban a Francisco su último adiós.
-Redacción-