Río de Janeiro vive una de las peores olas de calor de su vida
Los brasileños combaten las altas temperaturas sumergiéndose en baños helados

Río de Janeiro se enfrenta a una intensa ola de calor, un fenómeno que los expertos atribuyen a los efectos del cambio climático. El pasado sábado 25 de enero, la ciudad registró temperaturas máximas de 39°C, con una sensación térmica que alcanzó los 48,9°C la semana anterior, según datos del Centro de Operaciones de Río (COR). Esta situación extrema, cada vez más frecuente debido al calentamiento global, está obligando a los cariocas a buscar formas creativas de combatir las altas temperaturas. Los restaurantes locales se han convertido en improvisados centros de refrigeración, colocando cubos de hielo bajo las mesas para que los clientes puedan refrescar sus pies e instalando duchas exteriores para ofrecer alivio del calor sofocante. Las playas de la ciudad, especialmente en la zona sur, se han visto abarrotadas de miles de personas buscando refrescarse en el mar. Asimismo, muchos residentes están recurriendo a baños de hielo como método para combatir las altas temperaturas tras realizar ejercicio.
Esta ola de calor no es un fenómeno aislado en Brasil. En São Paulo, la ciudad más poblada del país, se registró el sábado 16 de marzo la temperatura más alta para un mes de marzo desde que se comenzaron a realizar registros en 1943, alcanzando los 34,7°C. Los científicos advierten que estos eventos climáticos extremos se volverán más frecuentes e intensos a medida que avance el cambio climático, subrayando la urgente necesidad de tomar medidas para mitigar sus efectos y adaptar las ciudades a estas nuevas realidades climáticas.