¿Qué hizo el obispo Prevost para apartar a los curas acusados de abusos sexuales?
Una periodista peruana asegura que el ahora papa León XIV siempre se puso del lado de las víctimas y que las acusaciones son una campaña para desprestigiarle

"Si no hubiera sido por Robert Prevost, Sodalicio no habría sido eliminada por el papa Francisco. Su apoyo a la investigación fue decisivo". Así de contundente es Paola Ugaz, periodista peruana que junto a su colega Pedro Salinas, destapó el escándalo de abusos sexuales en la organización ultracatólica peruana Sodalicio, considerada una secta. De hecho, la disolución de Sodalicio, en enero de 2025, fue una de las últimas decisiones del papa fallecido. Ugaz asegura que desde el primer momento, Prevost, entonces obispo de Chiclayo y número dos de la Conferencia Episcopal peruana, se puso del lado de las víctimas y apoyó el trabajo de los periodistas. "En 2018 solo cinco obispos escucharon a las víctimas. Uno de ellos fue Prevost. Siempre nos apoyó a nosotros y a nuestro trabajo", dice Ugaz. Los dos periodistas sufrieron acoso mediático y judicial. El principal clérigo de Sodalicio, el obispo de Piura, José Antonio Eguren, llegó a denunciar a Salinas por difamación, acusación que puede conllevar hasta once años de cárcel. Según Ugaz, Prevost fue clave para impulsar la investigación que llevó a cabo el Vaticano sobre la organización ultracatólica. "La primera decisión contra Sodalicio la tomó el ahora papa León XIV. Fue la decisión de cesar a Eguren como obispo en abril de 2024", dice. Un mes después del cese comenzaron a difundirse, en algunos digitales relacionados con la extrema derecha, acusaciones contra Prevost por supuesto encubrimiento de abusos. Ugaz asegura que los casos son falsos. Se trata, dice, de una campaña de desprestigio como venganza por haber desmantelado el mayor escándalo de abusos sexuales en el clero que ha sacudido Perú, organizado, además, por los sectores más ultraderechistas.
-Redacción-