STOP a la libre circulación, aunque más bien podría decirse que estamos ya en una marcha atrás en los principios del espacio Schengen. Porque los controles fronterizos que Alemania empiezan aplicar a partir de este lunes, y que han enfadado sus vecinos, no son los primeros. Actualmente, varios estados ya contemplan medidas similares por cuestiones migratorias o alerta yihadista. Es el caso de Francia, Austria, Italia o Dinamarca. Además de las amenazas por terrorismo, la celebración de cumbres internacionales o eventos deportivos, y por supuesto en su día la pandemia y la crisis migratoria por la guerra en Siria, sirvieron para que a lo largo de estas tres décadas de fronteras abiertas se aplicaran restricciones. Va a ser ésta una semana peliaguda para la Unión Europea, porque, además, Países Bajos tiene previsto pedir a Bruselas que le exima de la política migratoria común. El Ejecutivo de coalición holandés, encabezado por la ultraderecha, pretende endurecer durante dos años el derecho asilo. Y como en el caso de Alemania, con controles fronterizos para limitar el flujo migratorio.