33 años han pasado de la inauguración del AVE Madrid- Sevilla. Un tiempo que está empezando a pasar factura. Según José Trigueros Rodrigo, presidente de la Asociación de Ingenieros de Caminos, "la línea ya lleva muchos años funcionando y está obsoleta, Adif prepara restauración integral". En los dos últimos años, la Alta Velocidad ha sufrido roturas de catenarias, fallos eléctricos, incidencias informáticas y hasta robos de cable. Provocando caos tras caos. Incomprensible horas y horas de retrasos y trenes cancelados o tirados en mitad de la nada. "Si un tren se para, todos se tienen que parar, no hay otra", señala José Trigueros Rodrigo. Decenas de miles de personas atrapadas y afectadas. "Es una falta de mantenimiento puntual y de presupuesto para el mantenimiento", puntualiza el presidente de la Asociación de Ingenieros de Caminos. La irrupción de dos nuevos operadores, dos nuevos competidores, Iryo y Ouigo, también está complicando las vías. "Si antes había un tren cada hora y ahora tres o cuatro se necesita un mantenimiento más exhaustivo que el que se está haciendo", apunta el experto. Se pide también una revisión del protocolo de actuación que no deje a nadie sin las vacaciones soñadas.