La gentrificación ahoga a Palma de Mallorca
Los vecinos piden soluciones
Carme Verdaguer es miembro de la asociación de vecinos de Canamunt, un barrio céntrico de Palma de Mallorca donde cada vez hay más turistas y menos vecinos. Esta misma semana en el chat que tienen los vecinos hay cuatro familias a las que los caseros les han dicho que no les renovarán. Familias como la de Rosa que lleva 26 años en el barrio y 18 en la casa donde vive con su pareja y sus dos hijos. Los pisos se venden muy caros y quienes los demandan son extranjeros. Carmen y el resto de vecinos quieren evitar que su barrio se convierta en un parque temático pero no saben qué hacer.