Crónica de una OPA fracasada
El disgusto del BBVA contrasta con la fiesta del Sabadell
Para el BBVA han sido 17 eternos meses, en los que lo ha intentado todo. "Ofrecimos la mejor propuesta posible. Una oferta objetivamente atractiva. No solo para los accionistas de ambas entidades sino también para España y Europa", dicen. Pero el esfuerzo, no ha sido suficiente. Según su presidente, Carlos Torres, "creemos que hubiera sido fantástica, por eso es una oportunidad perdida para todos". Pensando en crecer, la entidad vasca siempre ha estado convencida del sí, pero las condiciones del Gobierno, basadas en el criterio del interés general, incluyeron una inédita consulta pública o la prohibición de la fusión durante 3 años. Además, la Comisión Europea, incluso, tiene abierto un procedimiento de infracción contra España, por sus reticencias. Sin embargo, la última palabra la tenía el Banco Sabadell, diciendo no, una y otra vez. Insistiendo en sentirse infravalorado. Tras decaer la OPA, hoy, brindando con cava, cumplía su sueño y acababa con otro.