Agricultores, ganaderos y apicultores, arruinados por los incendios forestales
Son las dramáticas consecuencias económicas de este verano aciago
Una a una el fuego acababa con todas las colmenas. Los equipos de extinción trataban de evitar lo inevitable. Era la impotencia de Luis hace una semana. Lo ha perdido todo. 25.000 euros arrasados por las llamas. Este año no va a recolectar ni una gota de miel y los próximos tampoco porque la zona tardará en regenerarse. El mismo fuego de Cangas de Narcea fue el que amenazó las vacas de Ángel. Una semana después, los animales están a salvo en otro cercado y él a cuantificar pérdidas. En esta otra ganadería de A Mezquita, en Ourense, las vacas se alimentan gracias a la solidaridad de los vecinos. Camiones de forraje llegados de otras localidades porque los pastos están arrasados. El fuego en Oimbra hace días también acababa con la mitad de la cosecha de esta bodega. Las uvas cocidas por el calor, inservibles. Y todas estas botellas inevitablemente se quedarán vacías. Pérdidas cercanas a los 200.000 euros y este año no podrán exportar su vino de La Ribera Sacra.