Cada módulo tiene unos 55 metros cuadrados y aunque cueste creerlo dentro van el salón comedor, una habitación, la cocina y el baño. Pesa 50 toneladas y en 5 meses y medio se ha construido y montado en una fábrica. En solo 10 minutos lo suben con mucho cuidado, lo van ajustando y acaban ensamblándolo al resto. En 9 días levantarán el edificio modular más grande de España, con menos residuos, menos ruido, menos inseguridad y en menos tiempo (con la construcción tradicional se tardarían unos 2 años y medio y con módulos unos 12-15 meses). Los 40 pisos esperan a jóvenes y familias monoparentales por poco más de 300 euros al mes. Y aun así, muchos le ponen pegas y solo lo tomarían a corto plazo. Y a otros, simplemente, no les acaba de encajar.