El Valencia salió a por todas sobre el césped de Mestalla y dejó claro desde un primer momento que no iba a ponerle las cosas fáciles al Villarreal. El equipo che se adueñó el ritmo desigual del choque y acabó llevándose tres puntos en un partido bronco que el rival no supo interpretar (2-0). En la rueda de prensa tras el partido, el entrenador del Villarreal, Unai Emery, lamentó los parones y las faltas que hicieron imposible que los suyos cogieran un poco de aire en el juego y explicó que "si el equipo contrario no quiere bailar, es difícil bailar". Por su parte, José Bordalás, entrenador del Valencia, se mostró satisfecho por el resultado y por el planteamiento en el terreno de juego. "Esto es lo que quiere ver la afición del Valencia, esto es lo queremos ver todos, un equipo solidario que sabe manejar los partidos", ha zanjado.

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