Sevilla y Villarreal cerraron los partidos del domingo con un empate sin goles que no dejó con buen sabor de boca a ninguno de los equipos. La noticia negativa del partido la puso el capitán sevillista, Sergio Escudero, que en una fea caída se dobló el codo y tuvo que ser trasladado al hospital. El club ha informado que sufre una luxación en el codo izquierdo con posible fractura, pero hoy lunes se hará un nuevo examen. El entrenador local, Pablo Machín se mostró optimista de cara a la lesión de Escudero “se lo han llevado al Hospital, no he visto la caída, pero ojalá sea más aparatoso que otra cosa". Por su parte el entrenador del Villarreal, Javier Calleja, se mostró contento con el resultado, “hemos tenido ocasiones claras para adelantarnos, hacía muchísimo calor y nos vamos contentos por sacar un punto en un campo tan difícil”.